Cuando sonó el despertador, hacía apenas dos horas que dormía. Las timbas en el zoo acababan siempre tarde, especialmente si combinaban las apuestas con una botella de licor robada del despacho del director. Ahora, aquella juerga nocturna le pasaba factura en forma de sueño y resaca. Y ni siquiera había sido una velada fructífera: el orangután era una pésima pareja de juego; el panda y el búho no tardaron en desplumarles… En breve abrirían el zoo. Tenía el tiempo justo para asearse y desayunar algunas hojas de eucalipto. Cuando llegaran los visitantes, olvidaría el dolor de cabeza y les enseñaría su cara más entrañable.
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K _ _ _ _ (sustantivo masculino)
Descubre qué palabra inspira el cuento.
Las hojas de eucalipto han delatado al koala :-)
¡Sí, la respuesta es koala! Esta vez era fácil, ¿verdad? :-)
Si os animáis, ahora os toca a vosotros escribir algún microcuento con un koala como protagonista.
jajaja! muy bueno, menudos son en el zoo de noche, dicen que los koalas además venden DVDs piratas para ganarse las pelillas que luego apuestan al poker y los monos se pasean ofreciendo cerveza beer mientras el orangután, el elefante y el lemur lo animan todo con su trío de jazz con ritmos africanos